domingo, 6 de marzo de 2011

Testimonio de un soldado herido

Escape como pude, caminando por la blanca nieve, tan pura, invernalmente bella, que a cada paso se teñía del rojo de mi sangre, el dolor, el sufrimiento que había visto, quedaba plasmado en aquel retrato infernal, evado mis pensamientos, lo cierto es que me atormenta mi pasado, no espero que llegues nunca a entenderlo, es imposible de expresar con palabras, puede hacer llorar al más fuerte de los hombres y acobardar el más valiente de los sentimientos.
 Continuo un largo y tendido rato, sin más ayuda que mi voluntad, sin más alivio que el pensamiento certero de encontrarte, te prometí volver y seria un cobarde si no me arriesgara a intentarlo.